Título: En una playa al sur de tu horizonte
Autora: Cristina Prada
Editorial: Esencia
Sinopsis
Seer Porter vive en el West Side. Tiene un buen trabajo, unas amigas a las que adora, y está muy unida a su familia, pero ella no es como todos creen. Su carácter decidido y extrovertido solo es una coraza para esconder a la chica tímida y a veces triste que en realidad es.
Ryder Quinn también vive en el West Side. Valiente e impulsivo, ha asumido que es mejor no creer en nada y ser fiel solo a tus propias reglas.
Desde que Seer y Ryder se ven por primera vez, algo a lo que no saben poner nombre ni color estalla entre ellos y toda su existencia acaba patas arriba.
Sin embargo, la vida de Seer da un giro de ciento ochenta grados cuando una mañana recibe una llamada de un abogado al que ni siquiera conoce. Su padre, que la abandonó cuando tenía cinco años, ha muerto y su última voluntad ha sido dejarle su rancho en Ubud, en Bali, Indonesia, al sur de todo su mundo.
Seer vuela hasta allí con la idea de venderlo, cerrar cualquier asunto pendiente y regresar, pero lo que encontrará en Ubud hará que se lo replantee absolutamente todo.
Opinión personal
Puede ser que me repita si comienzo diciendo en esta reseña que la nueva novela de la autora es brutal, pero es que recalco una y mil veces cada una de esas palabras. Siempre consigue sorprenderme, ya sea de una forma u otra. Este libro es GIGANTE. Así, en mayúsculas. Ha logrado dibujar una historia de amor intensa y complicada, entrelazada con grandes dosis de dudas, miedos, ganas, perdón y rendición.
Seer, nuestra protagonista, tiene todo lo que podría desear: un trabajo que adora y unos amigos y una familia por los que daría su vida. Todo parece perfecto, aunque no lo es. Ella no es perfecta y se ha forjado una coraza sobre la que se esconde del mundo y de sí misma. Su existencia dará un giro radical cuando su cruce con alguien que le hace querer ser diferente. Ryder, el protagonista masculino, lleva años aprendiendo a vivir el presente sin pensar en el futuro y sin querer más de lo que cree que merece. Hasta que ella aparece y desea que todo sea diferente y se permite el lujo de soñar. Pero, en ocasiones, soñar y desear pueden no ser suficientes...
Cuando ambos se conocen no están preparados para el huracán que cada uno de ellos va a suponer en la vida del otro. Todo estalla entre los dos y la química se hace palpable a través del papel cada vez que aparecen en escena. Les vamos conociendo y enamorándonos a la misma vez que ellos sin que sean conscientes. Se desprenden delante del otro de cada una de las capas de miedo y frustración con las que se han ido cubriendo a lo largo del tiempo. Somos testigos de su desnudez en todos los sentidos, cuando dejan al lado y fuera de su burbuja, al mismo ritmo que dejan caer la ropa a sus pies, la desconfianza, los miedos y las inseguridades y ponen sobre todas las cosas, lo bonito, lo intenso y lo visceral. Pero, cuando esa burbuja explota por los aires debido a los secretos y a la culpa, todo aquello se transforma en algo demasiado abrumador y terrorífico que les cala hasta los huesos, modificando incluso parte de su esencia. Años después, ya no son los mismos y les acompañamos de su mano en un nuevo camino de autodescubrimiento y crecimiento y de cómo aprender a lidiar con sus nuevas responsabilidades para enmendar el pasado y lo que todavía duele. Lo fueron todo y ahora no son nada, aunque las cenizas amenacen con prenderse a cada paso. Pondrán todo lo que tienen y más en liberarse, perdonarse, sincerarse y dejarse llevar, pensando únicamente en ellos y en todo lo que les queda por vivir, pero también en lo que perdieron y nunca recuperaron.
Ella siempre ha puesto a todos por delante de sus propias prioridades o necesidades, él quiso ponerla a ella en primer lugar y acabo hundiéndose más en un pozo oscuro del que no supo salir. Ella es un soplo de aire fresco entre tanta amargura, pero él no se permite tomarlo. Ella se abre a él con una confianza ciega y siendo más auténtica que nunca y él la desea más que nunca, aunque no puede y no se atreve a arriesgarse, el dolor y el pasado pesa más.
En realidad, ambos protagonistas son mucho más parecidos de lo que creen. Ryder siempre dice que Seer quiere salvar a toda la humanidad, a pesar de que él lleva cargando sobre sus hombros el peso del mundo desde hace demasiado tiempo. Desde su primer encuentro la conexión que sienten se hace incontrolable y son conscientes, aunque pretendan negarlo constantemente, de que su historia no es pasajera. Es mucho más. Cuando vuelven a reencontrarse, frente a frente, ya sin dudas y con sus sentimientos sobre la mesa y sin caretas ni disfraces que les permitan ocultarse, deberán decidir si desean arriesgar y soñar a lo grande por primera y última vez. Siendo libres, únicamente ellos. Sinceros, reales y fieles a sí mismos, haciéndose mejores el uno al otro.
Si os animáis a descubrir esta novela, os encontraréis con una trama adictiva, intensa, cautivadora, especial, sensual, abrumadora y deliciosamente narrada con una pluma repleta de matices, que es característica de la autora. Los personajes principales son más completos, humanos y cercanos y están mejor construidos gracias, en parte, a la acción de los personajes secundarios. Cristina describe las distintas escenas con mimo (hay diálogos que contienen mucha chispa y son absolutamente geniales), que se suceden a un ritmo trepidante, envueltas en un halo de magia que solo pueden albergar las calles de Nueva York y los paisajes idílicos de Bali.
Al terminar de leer esta novela, solo le dije una cosa a su autora. Hoy me reafirmo. Gracias por escribir esta historia, Cristina. Enhorabuena.
Puntuación: 5/5
* Gracias a la autora y a la editorial por el envío del ejemplar.