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30 sept 2020

Reseña Culpa nuestra

 


Título: Culpa nuestra (Culpables 3)

Autora: Mercedes Ron

Editorial: B de Bolsillo

 

Sinopsis

La relación de Nick y Noah está pasando por su peor momento, y parece que nada podrá volver a ser como antes... Van a tener que pasar por muchas cosas para finalmente comprender si de verdad están hechos el uno para el otro o si por lo contrario, estar separados es lo que de verdad les conviene.

Pero ¿acaso se puede olvidar un amor tan fuerte? ¿Cómo pueden borrarse los recuerdos tatuados en el corazón?

El amor no siempre es suficiente y el perdón a veces no basta para solucionar las cosas.

¿Serán capaces de dejar atrás el pasado y volver a empezar?

 

Opinión personal

Con este título llegamos al final de una nueva historia creada por Mercedes Ron. Esta novela me ha parecido más madura que las otras dos partes anteriores, quizá por el crecimiento y evolución que muestran los protagonistas a lo largo de los capítulos.

Tras el abrupto y doloroso final de la segunda entrega de la trilogía, somos testigos del cambio que experimentan tanto Noah como Nick. Él, roto  tras todo lo ocurrido, se centra en prosperar en el trabajo, ya que es lo único que le mantiene cuerdo desde que todo se desmoronó en un abrir y cerrar de ojos. Se ha empeñado en odiar todo lo que representa y le recuerda a su hermanastra. A Noah, en cambio, la vemos más perdida. Se siente más culpable que nunca y, a pesar de convencerse de que tiene que seguir adelante, cada encuentro fortuito con Nick derrumba esa convicción y sus defensas. Lo que sintieron, y aún sienten aunque se lo nieguen hasta el infinito, sigue más vivo que nunca. Sucesos encadenados e inesperados les llevarán a un punto de no retorno.

En esta parte de la historia Noah intenta olvidar por encima de cualquier cosa. Por instantes la sentimos más fuerte y más decidida, pero pronto, momentos después, vuelve a la casilla de salida y el dolor y echar de menos a quien ya no está le mantienen en tensión e intranquila la mayor parte del tiempo. Un hecho con consecuencias sorprendentes le hará ver por fin las cosas con mayor claridad y ser consecuente con sus actos y más valiente. Por su lado, Nick quiere demostrar a todos, sobre todo a su familia, qué es capaz de hacer en cuanto a negocios se refiere. Se ha convertido en alguien más centrado y sensato, pero también más frío como medida de protección para no volver a sufrir. Se ha obligado a no sentir nada ni implicarse en relaciones, aunque su criptonita particular siga consiguiendo el mismo efecto cada vez que la tiene delante. Ambos se empeñan en negar sus sentimientos, pero el destino tiene otros planes y piensa cruzar sus caminos constantemente. Necesitarán llorar, sentir rabia, incertidumbre, miedo y dolor, crecer y evolucionar para dar lo mejor de sí mismos, quererse y estar siempre para el otro y, finalmente, poner todo en perspectiva  para ver la luz al final del túnel.

El recorrido de los dos protagonistas por la trilogía es brutal. Encontraréis idas y venidas, algún comportamiento toxico por no saber gestionar determinadas emociones y ser tan arrojados, valientes e inconscientes de lanzarse al vacío sin red de seguridad alguna.

Si os gustan este tipo de historias, no os la podéis perder. Leeréis una trama bien desarrollada y narrada con un pluma repleta de matices y ese toque de acción, intriga y misterio, con el que la autora impregna todas sus novelas. Los personajes, tanto principales como secundarios, convierten el argumento en algo más fluido, dinámico y completo. Felicidades, Mercedes.

 

Puntuación: 4.5/5

* Gracias a la editorial por el envío del ejemplar.

* Encontrarás la reseña de la primera parte de esta historia aquí. La de la segunda, aquí.

 

25 sept 2020

Descubriendo más de... La absurda ley de Murphy & Jones (Marta Lobo)

 

¡Buenas tardes, soñadores!

¿Preparados para descubrir más sobre la nueva novela de la autora Marta Lobo? La absurda ley de Murphy & Jones promete amor, diversión, ternura y muchas emociones.

¿Os la vais a perder? ¡Continuad leyendo!


1.      Marta, bienvenida a nuestro pequeño rincón. ¡Nueva novela en el horizonte! ¿Hay nervios?

 

¿Nervios?

Muchísimas gracias por invitarme.

Si metéis aquí el gif de una loca tirándose de los pelos, se parecería mucho a lo que soy ahora mismo.

Los nervios son una señal inequívoca de que seguimos haciendo lo que nos gusta, mejor dicho, lo que nos apasiona. En el momento en que los nervios, las mariposas desbocadas, el cosquilleo al enviar el manuscrito o las mil millones de sensaciones que tenemos los escritores antes de publicar una nueva novela, me retiraré para hacer punto bajo un árbol que dé buena sombra.

 

2.      ¿Qué vamos a encontrar en «La absurda ley de Murphy & Jones»?

 

La historia de amor entre Lara y Jero.

La historia de secundarios, a veces dura, a veces divertida, que nos va a enseñar a ver el mundo con otros ojos.

Amistad de la buena, de la que no traiciona.

Familias que están para lo bueno y, sobre todo, para lo malo.

Peleas.

Segundas oportunidades –y hasta terceras–.

Ver cómo van madurando ciertos personajes.

Incógnitas para resolver.

Momentos muy intensos entre amigos.

Recetas deliciosas que querréis probar.

Problemas que se irán solventando –o no– a medida que transcurre la historia.

Canciones, muchas canciones.

Lugares, muchos lugares.

Amor, pasión, deseo, amistad, familia…

Y paro aquí porque os desvelo hasta qué es lo que cenan en la primera ci… Si es que se me escapan las cosas.

 

3.      Lara y Jero. Jero y Lara. Ellos son los protagonistas de esta historia. ¿Cómo ha sido darles vida?

 

Ha sido jodidamente divertido.

La verdad es que me lo he pasado muy bien con estos dos.

Llegaron sin ser llamados, pero se han quedado con la firme intención de autodeclararse mis personajes más dulces y algo irreverentes.

Dar vida a un personaje siempre trae quebraderos de cabeza, pero con ellos (y con todos los que participan en esta historia, que son muchos) ha sido tan sencillo, que me da que las lectoras vais a cogerles el mismo cariño que yo.

Es que son jodidamente irresistibles, de verdad.

 

4.      Describe a cada uno de ellos únicamente con tres adjetivos.

 

Solo tres me parece un sacrilegio para definir a estos dos huracanes, pero a ver si me sale algo…

Lara: dulce, decidida y cabezota.

Jero: irresistible, provocador y apasionado.

 

5.      ¿Te costó mucho poner en palabras lo que bullía en tu cabeza al pensar en esta trama?

 

Os cuento un secreto.

Empecé con esta novela en noviembre de 2019.

No tenía nada, solo una idea bullendo en mi cabeza.

Pero antes de tener siquiera el planteamiento de la historia, la sinopsis, la portada y el título, ya estaban plasmados en un papel y diseñada. Una completa locura.

Fue empezar con el prólogo, que es intensito de narices y todo fue fluyendo.

Aunque este 2020 nos dio un golpe terrible en marzo y fueron meses en los que escribir se dificultaba, en julio puse punto final a la historia sin quedarme en blanco o sin ideas.

Han sido muy fáciles de plasmar en papel, son personajes que me han hecho el camino tan sencillo, que creo que ellos mismos son los que han escrito su historia.

 

6.      ¿Qué crees que vamos a sentir cuando nos adentremos entre las páginas de la novela?

 

Mmm… Pues la verdad es que no sé lo que vais a sentir con total certeza.

Yo os puedo decir lo que yo he sentido al leerlo por decimo novena vez.

He entendido que el mundo gira demasiado rápido a veces y no nos damos cuenta de que dejamos pasar muchas oportunidades. Que el trabajo nos come muchas horas, que no tenemos tiempo para un café o unas cervezas con las amigas, pero que llega un día, sin que lo esperes y el mundo frena un poco al conocer a alguien. Y entonces las cosas parece que se dibujan más sencillas, que es el momento adecuado en el que tiene que pasar.

He disfrutado viendo cómo dos personas se van conociendo y en poco tiempo sienten que ya se conocían, que no necesitan meses o años para reconocerse.

He sentido. He sentido mucho el amor, el dolor, los sentimientos encontrados, ese momento en el que las cosas se van de las manos, la indecisión, las traiciones o el mero hecho de que la vida, demasiadas veces, es muy injusta con las buenas personas.

Así que lo que quiero es que entendáis, disfrutéis y sintáis. Con esto me doy por satisfecha.

Si ya os gusta la historia y os enamoráis de todos ellos, seré mucho más feliz.

 

7.      ¿Tiene algo de diferente este libro respecto a tus anteriores trabajos?

 

Como siempre hay muchos personajes importantes, historias de secundarios muy interesantes, mucha música, un Tour que podréis ir haciendo mientras leéis la novela, mucho amor, pasión, momentos divertidos e intercambio de frases con doble sentido entre los personajes.

Y lo diferente que vais a encontrar, os tocará esperar a que se publique la novela. Es algo en lo que sigo trabajando y que espero que lo disfrutéis mucho.

 

8.      ¿Puedes deleitarnos con algún fragmento inédito de la historia? (Uno de tus favoritos si es posible).

 

Ufffff, tema complicado sin cascar ningún spoiler de los gordos, pero voy a revisar las notas con un buen café y vuelvo en unos minutos.

Veinte minutos después

Joder, es muy complicado cuando estoy tan enamorada de esta historia. Tienen muchos momentos que me encantan: divertidos, apasionados, desgarradores en algún momento (ejem), pero poneros la última frase de la novela sería el mayor de los spoilers y algo de ese final también. Por lo que me he decidido por algo que sucede al principio de la historia más o menos. Cuando Lara se da cuenta de que su mundo ha frenado un poco y se permite disfrutar. He censurado por posibles spoilers. 

 

«Los nervios se me acumulan en la boca del estómago. Lo que veo es real: hablan como si se conociesen de toda la vida, Jero encaja tan bien tanto conmigo como con mi familia y amigos, que comienzo a sentir que da igual que esa fecha esté marcada en rojo en el calendario. Dicen que lo bueno, si es breve, dos veces bueno. Así que me voy a olvidar de que es poco tiempo, que los dos podemos sentir o que alguno de los dos no lo llegue a hacer. Que si hay que saltar, saltamos, y si hay que volar…

—Volamos.

Escucho la voz de Jero a mi lado. No sé en qué momento he cerrado los ojos y vuelto al baño a terminar de secarme el pelo.

—Si hay que volar, volamos, Lara.

Sus manos se pierden en mi cintura y su boca ataca la mía sin ningún tipo de piedad. Le da igual que a escasos metros se encuentren su hermano y Nic hablando sobre aplicaciones de diseño. Siento cómo su cuerpo parece temblar y el mío le acoge, le da paso, le dice que estoy dispuesta a todo por esto, que si echamos la carne, la echamos los dos sin miedo.

—Eres tan real… Es como si antes de ti no hubiese habido nada, no hubiese vivido de verdad. ¿Qué estás haciendo conmigo?

—Pues espero que vivir el verano de nuestras vidas. Ese que recordaremos siempre con una sonrisa.

—¿Aunque tengamos que volver después a nuestras vidas?

—Aunque tengamos que volver después a nuestras vidas.

Jero sonríe y yo pido a las estrellas que sé que brillan fuera, que alarguen el verano, que nos den días de treinta horas y noches eternas para no tener que decir adiós demasiado pronto».


 

9.      Algo más que nos quieras contar…

 

Que espero que os enamoréis de ellos, de su historia, de sus pasados, de su presente y de sus futuros, de todos ellos.

Que es la novela más larga que he escrito (autoconclusiva).

Que 2021 puede que venga sin ninguna novela por temas personales.

Que podéis encontrarme en las redes como @martaloboautora por si queréis matarme cuando conozcáis a Lara y Jero o por si os apetece crearos más ansias con todo lo que he ido colgando de la historia en Instagram.

Que muchísimas gracias por seguir leyéndome, por confiar en mis locuras escrituriles y por haber llegado al final de esta entrevista.

No sé si he aclarado algo con las respuestas, pero espero que al menos os apetezca conocer a Lara y Jero. Y eso que no he puesto fotos de los protagonistas, porque con eso ya os convenzo seguro.

Mil gracias por la entrevista y por hacerme un hueco tan preciado en el blog.

Nos vemos por las redes.

 

¿Qué os ha parecido, chicos? ¿Os ha gustado? Mil gracias por todo, Marta. ¡Feliz lanzamiento!

Y soñadores, vosotros ya sabéis, a partir del día 28 de septiembre podréis encontrar la novela aquí.

¡Disfrutad de un gran fin de semana!



 

21 sept 2020

Descubriendo más de... Los chicos malos siguen apostando (Cristina Prada)

 

¡Buenas tardes, soñadores!

Mañana sale a la venta la nueva novela de la autora Cristina Prada: “Los chicos malos siguen apostando”. ¿Queréis descubrir más sobre ella?

¡Seguid leyendo!

 
 

1.        ¡Hola, Cristina! Llega una nueva novela y una muy esperada. ¿Qué tal ha sido la experiencia de volver con Héctor y Aitana y vivir su historia de primera mano?

Hola. Estoy encantada de volver a estar aquí con vosotras. Escribir las novelas de Héctor y Aitana ha sido una experiencia maravillosa. Al principio, resultó complicada porque no daba con su historia. Pensaba y pensaba, pero, lo que se me ocurría, sabía que no era lo que ellos querían contarme. Incluso la primera vez que comencé a escribirla, tuve que dejarla y ponerme con otra historia porque no encontraba la línea. Sin embargo, gracias a una canción, Hey ma de Pitbull y J. Balvin con Camila Cabello, nació la idea de la que partió todo. He disfrutado muchísimo y también me he sorprendido muchísimo. Héctor y Aitana han volado más alto de lo que yo nunca había imaginado, lo que demuestra una vez más que el autor de un libro es sólo un vehículo de sus personajes. Esto muy orgullosa de ellos. 

 

2.        ¿Quiénes son ellos (por si alguien aún no les conoce...)?

Aitana es Aitana León, la hermana de Rico León, el Rey del Extrarradio, el prota de Los chicos malos apuestan, las chicas listas ganan, un libro que sigue dándome millones de alegrías, ¡ya vamos por la tercera edición y sumando!

Héctor es Héctor Cruz, el mejor amigo de Rico, lo que directamente asegura que va a haber mucho que contar.

 

3.        ¿Qué nos van a hacer sentir en esta novela? ¿Qué descubriremos en ella?

Vamos a descubrir la historia de dos personas que se quieren con todo el corazón. Sé que suena muy tópico, incluso obvio, pero es que es la pura verdad. Héctor y Aitana están enamorados hasta la médula y harían todo, y todo en mayúsculas, para que el otro sea feliz.

El problema para ellos es que las cartas que les tocan de inicio son muy difíciles. Aitana tiene diecisiete años y once meses cuando arranca el libro, Héctor veintinueve años, pero estamos hablando de un hombre sincero, honesto y de principios, una persona decente y nunca, jamás, se permitiría tocarla porque está convencido de que Aitana merece a alguien con quien descubrir la vida y que la descubran a la vez, no un hombre que ya tiene las respuestas a preguntas que ella ni siquiera se ha hecho. Además, es la hermana de su mejor amigo, lo que garantiza, sobre todo conociendo a Rico y su historia, que será una situación demasiado complicada. Héctor y Aitana se enamoran sin haberse podido permitir ni siquiera un beso.

Pero el amor es el amor, que no se le olvide a nadie, y si tiene que mover montañas, las moverá.


4.        Aquí volveremos a saber de los personajes que ya conocimos en "Los chicos malos apuestan, las chicas listas ganan". ¿Cómo verán ellos las cosas desde el otro lado?

Yo nunca he sido partidaria de contar el mismo libro dos veces. Si vas a tomar la decisión de volver sobre los pasos de una historia, tiene que estar fundamentada en que será atractiva para la lectora, que encontrará algo que le sorprenderá o le ayudará a atar cabos que necesita para entender otras cosas.

Esa premisa he intentado que se mantenga a lo largo de toda la novela. Rico y Daniela son parte de la historia, por supuesto, y tienen mucho peso, pero este es el libro de Aitana y Héctor y ellos son los protas indiscutibles.

Al final de Los chicos malos apuestan las chicas listas ganan, Daniela le pregunta a Héctor si le fue difícil estar separado de Aitana, dejando que entre líneas se lean millones de palabras. Él deja escapar una sonrisa triste y fugaz y pierde la mirada al frente «Eso va a ser difícil siempre y lo es aún más cuando la tengo cerca» «No he tocado a Aitana jamás», añade y Daniela sabe por qué, porque es un hombre decente, como decíamos antes.  «Por eso es difícil, ¿no? —replica Daniela—. Tiene que serlo que dos personas estén enamoradas y no puedan estar juntas».

Detrás de ese pequeño dialogo, hay toda una historia repleta de muchísimas cosas bonitas y de alguna que otra triste, pero sobre todo llena de amor. Teníamos que contarla.

 

5.        ¿Las expectativas son altas? ¿Hay presión y nervios?

Yo siempre estoy nerviosa con un lanzamiento jajaja, pero esta vez es cierto que lo estoy un poco más y que tengo más ganas (si es que eso es posible) de que podáis leer el libro y saber qué os parece. Héctor y Aitana se han colado en mi corazón y estoy deseando saber si son como os imaginabais, si habéis disfrutado con su historia… Expectativas es una de las palabras que más miedo da del diccionario, así que espero haberlo hecho bien. Héctor y Aitana y Rico y Daniela y Mati y Pablo y Suso y el abuelo más todos los nuevos personajes se lo merecen pero, sobre todo, se lo merecen las lectoras… Lo que te diga, nivel de nervioso modo un millón.


6.        ¿Podrías deleitarnos con algún fragmento de la historia que sea especial para ti?

—Tu hermano sólo necesita que estés bien, que seas feliz.

—¿Cómo voy a serlo si él no deja de sacrificarse por todos nosotros? —repliqué con vehemencia, ladeando el cuerpo para tenerlo de frente. Inconscientemente, albergué la estúpida idea de que, si Héctor entendía por qué necesitaba hacer eso por Rico, él también acabaría aceptándolo—. Podría llevar otra clase de vida infinitamente más cómoda, podría olvidarse de las carreras. Ser feliz —sentencié.

Héctor dejó escapar todo el aire de sus pulmones sin levantar sus ojos de los míos. Había sabido ver que eso era lo que, en el fondo, más me preocupaba de todo. Si debía elegir, Rico siempre nos elegía a nosotros y eso incluía cualquier cosa que sintiese por cualquier chica.

—Yo sólo quiero cuidar de Rico —continué—, igual que él cuida de todos nosotros.

Su mirada se oscureció y, con el reflejo de las luces en el agua, el color de sus ojos otra vez volvió a jugar y a posicionarse entre el verde, el azul, el aguamarina y de vuelta a un pardo, a un castaño, a un marrón.

—Eres increíble —susurró, y hubo veneración en su voz.

—No es verdad —repliqué en un murmullo—. Sólo hago lo que siento.

Y noté cómo el hechizo se hizo aún mayor. No podía ponerlo en palabras, pero

Héctor, todas las emociones que se despertaban en mí cuando me miraba, cuando estaba cerca... Nunca había experimentado algo así, era como si mi cuerpo fuera más mío que nunca y al mismo tiempo menos, porque estaba aprendiendo que necesitaba de otro para estar completo, como si cada palabra tuviese más valor y cada latido sonase mejor.

Sin embargo, todos aquellos sentimientos eran demasiado intensos y, abrumada, bajé la cabeza.

—Sé que es una estupidez —dije, porque necesitaba romper ese silencio lleno de tantas cosas—. Supongo que nadie se deja guiar por su corazón sin pensar en nada más.

Tal vez debería ser un poco más como Hugo, aprovechar todo lo que Rico me da y preocuparme sólo por mí, pero es que no soy capaz. Creo que no podría ser feliz así. — Callé un segundo, agobiada porque la mente me estaba funcionando a mil kilómetros por hora—. ¿A que es la mayor tontería que has oído nunca?

Lancé una sonrisa triste, con la mirada fija hacia delante; una sonrisa que en cierta manera era un escudo para luchar contra la idea de que, una vez más, nunca había sido más sincera, que poner lo que nos da miedo en voz alta, por un segundo, hace que asuste más.

—Yo escribo libros que después guardo en un cajón sin dejar que ninguna persona los lea —replico Héctor con la voz ronca— porque tengo demasiado miedo de que a nadie le gusten.

Mi corazón se aceleró, deprisa, y a cada latido me sentía más y más cerca de él.

—Yo sigo queriendo a mi padre —pronuncié.

La mayor verdad de todas, la que más miedo daba. Bosco era una persona horrible, nos había abandonado a nuestra suerte hacía mucho tiempo y, aun así, no podía no pensar en él, echarlo de menos, desear que cambiara y nos quisiera como yo lo quería a él.

—Yo ya no recuerdo al mío.

Sus palabras y, sobre todo, el tono que usó al pronunciarlas me hizo girarme y buscarlo con la mirada. Él tenía la suya perdida en el agua, un poco desolado, un poco desahuciado, y, por primera vez desde que lo había conocido, un poco decepcionado con la vida que le había tocado vivir. Su confesión lo hizo vulnerable como a mí la mía y también nos unión un poco más. Dos personas tristes, sentadas en el bordillo de una piscina, que acababan de entender que de alguna manera ya no estaban solas.

Las primeras notas de Con las ganas, de Zahara, comenzaron a sonar.

No lo dudé y dejé caer mi cabeza sobre su hombro. Estábamos juntos en eso.

—Necesitamos un momento catártico —anuncié de pronto, levantando la cabeza y buscando su mirada.

Héctor frunció el ceño, sin entender a qué me refería.

—Somos como esos nativos americanos que hacen la ceremonia del té purificador y después tienen que salir a cazar un oso —improvisé un rito.

—¿Quiere que cacemos un oso, señorita León? —planteó, burlón, entrecerrando los ojos al tiempo que se inclinaba suavemente hacia mí, sabiendo a la perfección que ése no era el quid de mi argumento.

—No se quede en las simples palabras, señor Cruz —respondí, imitando su gesto y su movimiento.

—¿Quieres entonces que vivamos una experiencia revitalizadora después de haber contado nuestras historias más tristes?

—Exactamente —respondí con una sonrisa, señalándolo con el índice.

Sin dudarlo, me levanté bajo su atenta mirada y una de sus preciosas sonrisas.

Me quité la corbata y la camisa, me desprendí de la falda y me lancé a la piscina en ropa interior, sin pensarlo. El agua me recibió a la misma temperatura perfecta y, cuando saqué la cabeza de ella, la sonrisa volvió a mis labios. La sensación era increíble, con el peligro moviendo deprisa la sangre en mis venas, con la idea de aventura llenándome de endorfinas, con la sensación de haberme abierto en canal y no guardarme nada.

—Sienta bien, ¿verdad? —repitió, casi en un grito, desde el borde.

Sentaba de maravilla y él era mi recompensa.

Héctor se deshizo de su ropa y, en bóxers, se lanzó a la piscina. Sonreí como una niña cuando su cuerpo se sumergió en el agua y el gesto se trasformó en una inmensa cuando emergió del líquido elemento justo frente a mí.

 

7.        ¿Nos quedaremos con ganas de más al llegar al final?

La historia son dos libros y al final, todo queda atado y las dudas, todas resueltas. Espero que os quedéis con ganas de más porque significará que no habéis tenido suficiente de ellos y que os encantaría tener más pedacitos de sus vidas, exactamente como me pasa a mí.

 

8.        ¿Algo que se haya quedado en el tintero y quieras contarnos?

Me gustaría contaros que la historia de Héctor y Aitana empieza en Vallecas, en el Barrio, como no podía ser de otra manera, pero que es un viaje y estaremos en Nueva York, en Nueva Jersey y otros lugares (que no os puedo contar porque quiero que os sorprendan) sobre los que he disfrutado muchísimo escribiendo y que espero que vosotros disfrutéis igual.

También quiero daros las gracias y deciros que el apoyo que le habéis dado a estos personajes desde que salió Los chicos malos apuestan, las chicas listas ganan ha sido maravilloso. Gracias, gracias, gracias.

 

¿Qué os ha parecido? ¿Os habéis quedado con ganas de seguir leyendo? ¡Mil gracias por todo, Cristina!

¡Recordad, soñadores! A partir de mañana encontraréis la novela en todas las plataformas digitales (aquí). ¡Qué la disfrutéis!

Besos de colores.