Autora: Mia Asher
Sinopsis
Solo fue necesaria una mirada… para convertirme en una
mentirosa.
Mi vida es un desastre.
Mi vida es un desastre.
Amo a un hombre. No, amo a dos. Creo…
Uno me hace el amor, el otro consigue que arda.
Uno es mi roca; el otro, mi kriptonita.
Estoy rota, perdida, y me odio a mí misma, pero no puedo
detenerme.
Esta es mi historia. La historia de mi perdición.
Esta es mi historia. La historia de mi perdición.
Opinión personal
Tenía altas expectativas puestas en esta novela por los
comentarios que ya había leído en redes sociales de distintas compañeras y por
eso comencé su lectura con cierto temor. Aseguran que solo existen dos extremos
para calificar esta historia: o la amas o la odias. Y digamos que yo me he
quedado en un punto intermedio. Hay momentos en los que no he llegado a
comprender en absoluto a la protagonista, pero también, en otras ocasiones, me
han dado ganas de abofetear a los protas masculinos por hacerle sufrir
demasiado. Pero, vayamos por partes.
La protagonista indiscutible de la historia es Catherine.
Tiene una bonita casa, un trabajo relacionado con la hostelería que adora y el
marido perfecto, Ben. Cathy lleva junto al amor de su vida unos once años, sin
embargo, aunque su relación parezca idílica de cara a la galería, de un tiempo
a esta parte, no lo es tanto. Hay un monstruo perenne y silencioso entre ambos
que no les deja vivir en paz. Esto le ha generado a Cathy un trauma emocional
que no le permite sentirse realizada como mujer y por el que está dispuesta a
darse por vencida. Esa brecha que parece insalvable y que se ha instaurado
entre ambos se hace más obvia cuando se suma otra incógnita a la ecuación:
Arsen, un joven guapo y seductor, dispuesto a conseguir lo que quiere a toda
costa. Nuestra protagonista tendrá que trabajar con él, lo que hará que su
mundo comience a resquebrajarse hasta estallar por los aires.
El miedo y pánico que Cathy experimenta ante la posible
pérdida como ya ocurrió en el pasado (descubriréis de qué hablo leyendo la
historia), se instalan en su interior, lo que hace que se encierre más en sí
misma y ponga distancia con Ben, aunque finja no hacerlo. Por el mismo motivo,
se siente más confiada, cercana y en sintonía con Arsen, lo que nunca hubiese
creído posible; al menos, no con alguien que no es el hombre que ha estado
siempre a su lado. Es una protagonista dañada, con dudas e impotencia ante una
situación que no sabe cómo solucionar. Entiendo su pesar y su disyuntiva, y que
con tal de sentirse liberada y olvidarse por un tiempo de su triste realidad y
de la distancia que se abre en su matrimonio, opta por tomar, quizás, el camino
fácil. Un camino donde atreverse a volver a sentir de verdad, sin pensar, sin
obligaciones, aunque las consecuencias estén esperando después para amenazar
con destruir todo lo que ha construido con esfuerzo y tesón a lo largo de los
años.
Si os animáis a leer este libro os vais a encontrar una
historia perfectamente narrada, adictiva, intensa, controvertida y cruel. Tan
real como la vida misma. La autora, a través de una pluma exquisita y repleta
de matices, nos lleva en volandas por un sinfín de sensaciones y sentimientos,
unas veces abrumadores, otras, contradictorios. Las situaciones de tensión y
las escenas eróticas están descritas con mimo y elegancia y los personajes que
las protagonizan están magistralmente construidos. Son cercanos, humanos y
perfectos en sus imperfecciones. La historia está contada en capítulos que
alternan el pasado y presente de los protagonistas. Me ha encantado conocer los
inicios de esa relación tan especial de Ben y Cathy y cómo han llegado a
encontrarse en la situación en la que están, y, por supuesto, él me ha
enamorado por completo. El final creo que es el correcto, el único posible
dadas las circunstancias, aunque ese epílogo tan desgarrador me haya roto el
corazón. Espero que Mia escriba algo más a partir del último capítulo.
Y,
ahora, la pregunta del millón: ¿Tú qué hubieses hecho estando en los zapatos de
Cathy?
Puntuación: 4/5
* Gracias a la
editorial por el sorteo y el envío del ejemplar.
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